AGENCIAS.- A sus 12 años de edad, su inocencia no le permite dimensionar que está catalogada entre las '100 mujeres más poderosas de México', de acuerdo con la publicación de la revista especializada en negocios y finanzas Forbes.

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Originaria del Ejido Albia del municipio de Torreón en Coahuila, Iveth Camila Ortiz Ramírez forma parte de un listado de mujeres que son reconocidas por marcar diferencia para la recuperación social, corporativa, artística, deportiva y política durante el último año.

¿Que fue lo que hizo? La niña logró registrar a más de 500 personas para recibir la vacuna contra el covid-19, mismas que no tenían los medios como el internet para obtener el registro y algunas de ellas no sabían leer ni escribir.

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¿Cómo logró ayudar a tantos?

Todo comenzó cuando la joven mexicana ofreció apoyo a través de sus redes sociales para ayudar a los abuelitos de la zona a realizar su registro.

Varias personas compartieron sus publicaciones al igual que una página de la comunidad de Albia, quien tiene alrededor de 2 mil pobladores, donde más personas reconocieron el buen acto de la menor y le dieron difusión, pues en dicha zona existen muchas personas que no cuentan con Internet.

Poco después, la joven consiguió una camioneta con altavoces con la que recorrió su comunidad anunciando que podía ayudar sin costo en el registro de quienes no supieran cómo hacerlo o a los abuelitos que no contaran con Internet.

Por medio de este perifoneo fue como los habitantes supieron de la posibilidad de recibir un folio de vacunación, ya que “la hija de Brenda” lo estaba haciendo de manera gratuita. Luego se le unió un carrito de sonido propiedad de un circo, cuyos integrantes también recibieron la ayuda de Camila a cambio de difundir la información.

Además de ofrecer parte de su tiempo en invitar a la gente para sacar los registros, imprimirlos y entregarlos a los solicitantes, también gestionó autobuses para llevarlos a la cita de la aplicación a más de 12 kilómetros del ejido.

Empezó con los mayores de 60 años, de los cuales, había personas postradas en cama y la joven hizo los trámites para que acudieran a vacunarlas a domicilio. Su recompensa nunca ha sido con interés monetario, en cambio, dice sentirse muy contenta y satisfecha con el mar de agradecimientos y bendiciones que ha recibido de la gente que ha sido testigo de su labor, una labor llena de humanidad.

Empezó ayudando a sus abuelitos

Lo que empezó como un apoyo para registrar a sus dos abuelos, se convirtió en una acción que cambió cientos de vidas, tanto en su comunidad como en sectores aledaños.

Respecto al futuro que Iveth Camila Ortiz visualiza, está el estudiar Medicina con la especialidad de Pediatría, sin descartar la posibilidad de obtener una beca para prepararse en el extranjero, ya sea a Canadá o a Japón, países con los cuales se identifica gracias a sus gustos musicales y artísticos.

“Me gusta la música pop en inglés y el K-Pop. Me gusta el rock en japonés, el trap, las series asiáticas y las de comedia”, añadió Camila, quien es la mayor de cuatro hermanas y está por cumplir 13 años el próximo 17 de agosto.

Actualmente cursa el primer año de secundaria y fue durante las vacaciones que en lugar de tomar descanso, se puso en los zapatos de los demás y no dudó en aportar su idea y de su energía para realizar una acción que salvó la vida a más de uno al conseguir su inmunización.

  • “Sus vacaciones de semana santa fueron las vacunas, tenía sus días libres y estaba con los registros”, compartió su madre, Brenda Ramírez.

La joven aprovechó para agradecer a quienes se han unido a la causa al aportar su granito de arena, para que esta idea siga avante en los demás sectores de edad que les toque su turno de vacunarse contra el covid-19... ¡Bravo por Camila!

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