Londres Inglaterra.- Una de las victimas declaró: "Mi piel se estaba derritiendo en mi cara, era insoportable". Las quemaduras de su mezcladora de 100 libras eran tan fuertes que la piel de su cara se derretió.
Tysha Stapleton, del sur de Londres, afirma que sufrió quemaduras de segundo grado cuando su NutriBullet explotó mientras hacía un batido rutinario de la mañana.
"No se supone que esté caliente, pero debe haberse calentado y explotado".
"El dolor era horrible, podía sentir mi piel ardiendo".
"Pensé que estaba ciego. Pude ver la piel de mi párpado colgando".
"Mi piel se estaba derritiendo en mi cara. Era insoportable".
Añadió: "Cuando vi mi rostro tuve miedo de mi propio reflejo. Tengo miedo de que así sea para toda la vida".
"Parezco un monstruo. Me quedaré con manchas en la cara por lo menos".
En el mes de enero Richard Moore, señaló que estaba pensando en emprender acciones legales contra los creadores de Nutribullet.
Los usuarios de Nutribullet comentan que el gadget puede explotar y salpicar a las víctimas con líquido que quema.
El productor de películas Richard Moore, de 27 años, estaba haciendo un batido de mantequilla de maní cuando notó que las cuchillas giraban más rápido que de costumbre.
Cuando la máquina Pro 900 empezó a producir humo, el londinense se apresuró a apagarlo.
Momentos más tarde explotó, salpicándolo en una manteca de cacahuete, miel y aceite de coco.
La víctima señaló: "Un líquido ardiente aterrizó en mis brazos, manos y cara. Yo estaba en un dolor extremo".
"Fue aterrador, estoy preocupado de que le pueda pasar a otros".
Richard comentó que la máquina comenzó a tirar humo antes de que explotara.
El joven, quien insiste en que no lo llenó en exceso durante el incidente de noviembre, agregó: "Los médicos me dijeron que el líquido descansaba encima de los nervios sin destruirlos, así que continuó quemando el nervio".
La abogada Lori Andrus, con sede en San Francisco, ha presentado una demanda contra Homeland Housewares en nombre del estadounidense Pete Damiano, quien sufrió heridas en su rostro y ojo mientras preparaba una salsa para pollo.
Lori dijo a Today Tonight Adelaide: "La compañía es consciente del problema y no se está abordando".
El problema no se limita sólo al Reino Unido y los EUA. Chris Jablonski, un electricista en Adelaida, Australia, dice que se niega a manejar NutriBullets después de que explotó en su taller.