TIJUANA.- Las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) confirmaron que las víctimas carbonizadas localizadas el pasado dos enero en el Aguaje de la Tuna, eran infantes entre 3 y 8 años.
Según las investigaciones, los menores fueron sustraídos del fraccionamiento donde vivían por una presunta deuda de 500 mil pesos con un grupo delincuencial.
El Fiscal Central, Hiram Sánchez dijo que los menores fueron sustraídos cerca de las 15:00 horas del sábado 02 de enero, los asesinaron en un sitio y luego a bordo de una Ford Explorer los trasladaron a la calle Guillermo Prieto cerca del arroyo donde fueron localizados.
Matan a un hombre frente a su pequeño hijo
Por el caso hay dos detenidos identificados con los motes de “El Arete o el Jack” y “El Pollo” que junto con cuatro sujetos realizaron el secuestro de los menores como medida de presión para que el padre pagara su deuda.
Sánchez señala que no hay indicios de que los padres hayan participado en el crimen contra el niño y la niña que no han sido reclamados.
La Fiscalía determinó que las víctimas eran una niña y un niño contra los que usaron un objeto pesado contra la cabeza de una y fuertes golpes en el abdomen contra la otra.
Finalmente, al haber una víctima femenina se reclasificará el delito y se imputará feminicidio.
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