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A 15 días que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) emitiera un oficio para suspender el consumo, fabricación y venta de ranitidina, sigue al alcance de la población.

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A pesar de que incrementa el riesgo de cáncer.

En un sondeo realizado por Excélsior Digital en siete farmacias en la Ciudad de México, se detectó que no todas cumplen con las indicaciones que emitió la Cofepris,.

Tres de ellas aún ofertan el medicamento de patente o de marcas genéricas en comprimidos, jarabes e inyecciones.

En el primer establecimiento ubicado al interior de Plaza Copilco, el personal de la farmacia pone a la venta la mercancía en dos presentaciones.

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Uno de marcas genéricas de nombre Phartidine de 150 miligramos y una caja del Laboratorio AMSA con cinco ampolletas de 50 miligramos.

Las venden a un costo de 70 y 33 pesos, respectivamente.

En el segundo punto en la calle Leopoldo Salazar, en la colonia Copilco el Alto, la presentación en ofrecida es en comprimidos de marca genérica.

Son medicamentos elaborados por el Laboratorio Apotex.

El precio del fármaco que se puede adquirir en dos presentaciones es de 15 pesos.

Contiene 20 tabletas de 150 miligramos o 10 tabletas de 300 miligramos.

En la tercer farmacia en Avenida Universidad, hay ranitidina en comprimidos genéricos, del Laboratorio Biomep

Las venden a 15 pesos la caja con 20 tabletas de 150 miligramos o 10 tabletas de 300 miligramos.

También, cuentan con una presentación de patente de la marca Ranisen de 150 mg a un precio de 140 pesos.

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Una característica de estos lugares que todavía comercializan medicamentos que contienen ranitidina, es que son farmacias pequeñas y minoristas.

En cuatro farmacias de distintas franquicias reconocidas negaron la venta del producto.

Reconocieron que por disposición oficial habían retirado la mercancía del alcance de la población.

Además, algunos de los empleados recomendaban consultar a un médico para poder cambiar el medicamento.

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Incluso ofrecían diferentes opciones que podían sustituir el fármaco, como Buscapina, Omeprazol o Pantoprazol vía oral.

La ranitidina se receta para prevenir y aliviar la acidez estomacal por ácido gástrico asociado con la indigestión ácida y reflujo gastroesofágicos.

Lo delicado es que su venta es libre en las farmcias.

Sin embargo, la Cofepris exhortó usar otros productos, ya que la posible presencia de la N-nitrosodimetilamina (NDMA) en medicamentos cuya fórmula incluye ranitidina incrementa el riesgo de desarrollar cáncer.

Es por ello que el pasado 29 de octubre en un comunicado la cofepris pidió a la población en general evitar la compra de este medicamento.

A las farmacias y a los distribuidores, suspender la comercialización, y a los titulares de los registros sanitarios detener la fabricación.

Solo los médicos pueden prescribir medicamentos por ello se recomienda consultar un especialista antes de sustituir cualquier fármaco.

Algunos lugares ofrecen productos con distinto nombre, pero con ranitidina como principio activo.

Incluso hay presentaciones que prometen ayudar en el tratamiento de la úlcera péptica, pero no se recomienda usarlos sin cosulta médica.

Ante la mínima posibilidad de contener la impureza del ingrediente conocido como N-Nitrosodimetilamina evitarse la venta.

No se ha informado que tan grave es la sanción para los lugares que no cumplen las disposiciones de Cofepris.