SONORA.-A lo largo de sus seis años de vida, Roco, un can ejemplar, dedicó cuatro años de servicio a la seguridad de los sonorenses.
El can sirvió como efectivo hasta que fue dado de baja de las filas de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) tras perder la batalla ante una serie de problemas de salud, por lo que empezó a llevar tratamientos médicos.
La partida del elemento canino, de raza pastor belga mallinois, se registró la tarde del viernes 3 de diciembre tras presentar problemas renales que obligó a darlo de baja del servicio activo para que pudiera ser atendido.
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Sin embargo, su legado queda entre los compañeros de la unidad canina, al destacar su servicio en detección de narcóticos, guardia y protección.
Durante el tiempo que prestó sus servicios junto a su manejador, participó en acciones para contribuir en la seguridad de los ciudadanos como pláticas preventivas en escuelas y colonias focalizadas, además colaboró en la vigilancia de áreas para identificar sustancias prohibidas e inhibir conductas delictivas.
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