Cuando un gorila de 181 kilogramos (400 libras) de peso agarró a un niño de tres años en el zoológico de Cincinnati, el tirador especializado que mató al simio no era de la policía.
Es un miembro del personal del zoológico especialmente adiestrado y pertenecía a uno de los muchos equipos destacados para enfrentar emergencias ante animales peligrosos en las diversas instalaciones de ese tipo en el país.
Esos equipos entrenan en polígonos de tiro, esconden fusiles y escopetas en diversos lugares de los zoológicos y clasifican a las especies más peligrosas que tienen bajo su cargo. Sus miembros entrenan en simulacros difíciles para afrontar situaciones como la que se presentó en Cincinnati, donde un niño cayó el pasado sábado en el recinto de exhibición del gorila.
Las autoridades no han hecho público el nombre del tirador especializado.
Es un compromiso difícil para ese tipo de personas que alguna vez quizá tengan que sacrificar a alguno de los animales entre los que trabajan. Sin embargo, los miembros de esos equipos entienden la necesidad de hacerlo si una vida humana está en peligro.
"Todos sabemos, cada vez que vamos a trabajar, que somos responsables de la seguridad no sólo de los animales a nuestro cargo, sino también de nuestros colegas y del público visitante", dijo Denise Wagner, integrante del equipo de respuesta en el zoológico de Phoenix, donde es cuidadora de primates especializada en orangutanes. "Nos tomamos muy en serio esa responsabilidad".
La muerte del gorila de Cincinnati ha creado indignación en torno a la vigilancia tanto del zoológico como la de la madre sobre el niño que se metió al recinto del gorila, pero también ha puesto los reflectores sobre el inusual trabajo de los equipos de respuesta en emergencias en los zoológicos.
La Ley de Bienestar de los Animales, del gobierno federal y que rige las actividades de los zoológicos, no requiere que estos tengan ese tipo de equipos, pero muchos parques de animales los establecen como parte de sus procesos para obtener la acreditación.
El equipo de respuesta para animales peligrosos del zoológico de Phoenix toma exámenes anuales de puntería, entrena en un polígono de tiro tres veces al año, y practica el cargar y el descargar armas de fuego, dijo Wagner. El grupo también simula una fuga o una incursión varias veces al año, con armas de plástico y un miembro del personal versado en el comportamiento de la especie desempeñándose en el papel del animal.