AGENCIAS.- Días antes de morir, la exgobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso hizo sorprendentes declaraciones a sus colaboradores cercanos.
Apenas tres días después de asumir la gubernatura de Puebla y tras un atropellado proceso electoral, Alonso les confesó a su equipo temer por su vida.
De acuerdo con la columna "La corte de los milagros" del periodista Rodolfo Ruiz, esto trasciende a seis meses del fatal accidente en el que falleció Martha Erika, su esposo el senador Rafael Moreno Valle y la tripulación.
A continuación la columna de Rodolfo Ruiz:
“Temo por mi vida” fue la confesión que Martha Erika Alonso Hidalgo hizo a un grupo de colaboradores apenas tres días después de haber rendido protesta como la primera gobernadora de Puebla tras un largo y ajetreado conflicto postelectoral.
En su despacho, en el cuarto piso del Edificio Ejecutivo del Centro Integral de Servicios (CIS), Martha Erika compartió a cuatro de sus funcionarios más cercanos su intención de grabar un video para dejar constancia de que estaba en peligro. Sin dar pormenores de las amenazas o riesgos que la afligían, la gobernadora escuchó ese lunes al mediodía las opiniones de sus colaboradores y ninguno apoyó su idea. Palabras más, palabras menos la persuadieron de no hacerlo, por las consecuencias mediáticas que un mensaje de ese tipo levantaría en la opinión pública.
La gobernadora insistió en grabar ese video y en que no se difundiera, a menos que algo grave le ocurriera.
Los convocados, que no sabían a fondo la razón del temor que embargaba a la gobernadora, la convencieron de no hacerlo. El argumento de uno de ellos selló la discusión: imagínate qué mensaje mandarás a los ciudadanos, que son víctimas de la inseguridad, si la gobernadora dice que tiene miedo y teme por su vida. Ahí concluyó la reunión de ese 17 de diciembre, en que Martha Erika Alonso cumplió 45 años de vida.
Siete días después, la gobernadora, su esposo el senador Rafael Moreno Valle y tres personas más fallecieron trágicamente en un accidente aéreo al desplomarse un helicóptero Agusta A109S, en el Cerro de la Chimenea del Chacuaco, poblado de Santa María Coronango, en el estado de Puebla.