La menor que logró fotografiar a su asesino fue Karina Blanco Durán, asesinada por un venezolano.

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Una joven de 16 años fue abusada y asesinada en Colombia. La víctima pudo informar a su familia a través de WhatsApp que alguien la estaba siguiendo. Incluso pudo enviar una foto del hombre.

El cuerpo de Karina Blanco Durán se encontró en el río Cáchira, en Norte de Santander. A partir de la foto que envió antes de morir, los familiares de la niña identificaron al violador. Lo encontraron y lo mataron brutalmente.

Carlos Martínez, jefe de la policía local, dijo que la policía logró detener al abusador de la joven, pero un pueblo de vecinos la atrapó y la asesinó. “La comunidad agredió a los policías que lo trasladaban y le causaron lesiones fatales al detenido”, describió Martínez.

Karina Blanco Durán quiso ser “una gran psicóloga” para ayudar a su mamá y poder darle un hogar. Solo ha pasado un año desde que ingresó a la universidad para comenzar a hacer realidad sus sueños.

Sin embargo, en la madrugada de este martes, Karina vio que su objetivo se vio truncado cuando un hombre la seguía mientras caminaba alrededor de las 5:30 a.m. en el corredor de La Vega, en Cáchira.

Desde su celular, envió una foto del perseguidor. Tras ello, tanto sus familiares como vecinos salieron en busca de la menor.


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La joven de 16 años salió temprano de su casa en la vereda “La Sardina” para asistir a su escuela en Barrio Nuevo.

Como todos los días, Karina tuvo que caminar unos 50 minutos por el sendero donde había un río y suficientes plantas, para llegar a la carretera principal donde esperaba el autobús que lo llevaría a la escuela.

A las pocas horas, Karina se encontró muerta y con signos de abuso sexual y su cuerpo se arrojó al río.

El comandante Carlos Martínez informó que el adolescente murió luego de ser atacado por un hombre de nacionalidad venezolana de 37 años.

En declaraciones al noticiero colombiano Noticias Caracol, el alcalde de Cáchira, Javier Pabón, insistió en que el presunto abusador había arrojado los restos de la menor al río. Además, indicó que la acosó y finalmente la mató.

Policías locales detuvieron al presunto agresor y cuando lo llevaban a la comisaría fueron interceptados por un grupo de familiares y vecinos de Karina que lincharon al sospechoso.

Allí golpearon al joven, quien murió a causa de una herida mortal que le propinó un familiar de la niña agredida.

El padre de Karina, César Blanco, dijo que su hija era una joven muy madura y enfocada que sabía lo que quería. Señaló que Karina les dijo a unos amigos que había un hombre persiguiéndola durante varios días, dijo a medios locales bluradio.