AGENCIAS.-Un hombre de 43 años comenzó a tener dificultar para respirar y después todo empeoró, moría lentamente sin estar consciente de ello y tras un largo peregrinar descubrió que su edredón era la causa.

Martín Taylor que tenía una vida sana, llegó al punto de no poder subir dos escalones sin casi morir en el intento.

“Subir las escaleras para ir a la cama era una actividad que me tomaba 30 minutos, ya que solo podía subir dos escaleras al tiempo y luego necesitaba sentarme y descansar”, añadió Taylor.

Los síntomas eran tan extremos, que optó por dejar su trabajo, padecía neumonitis por hipersensibilidad, pero no lo descubriría hasta mucho después.

De acuerdo con los médicos, esta enfermedad es tratable cuando se detecta a tiempo, se se tarda mucho causa cicatrices permanentes en los pulmones y la muerte.

Con Taylor no tenían idea de la causa, pasó por varios médicos antes de llegar con el adecuado.

Su médico de cabecera llamó a la clínica respiratoria con urgencia y habló con el doctor Owen John Dempsey, un médico especialista de tórax en el Hospital de Albyn BMI en Aberdeen, Escocia, ubicado a unos 30 minutos en carro desde Aberdeenshire.

“Su médico general fue muy astuto al no aceptar los resultados de la radiografía de tórax al pie de la letra”, dijo Dempsey, y agregó que puede ser difícil diagnosticar la neumonitis por hipersensibilidad porque los cambios a menudo son sutiles con un “leve gris difuso en los pulmones”.

Su muestra de sangre arrojaba que estaba expuesta a proteína aviar

Hacer el diagnóstico fue “casi un poco como un rompecabezas”, dijo Dempsey. Una de las primeras pistas fue el análisis de sangre de Taylor, el cual mostró que su sistema inmune estaba expuesto a la proteína aviar. Sin embargo, Taylor le dijo a Dempsey que él no tenía pájaros, solo un gato y un perro.

Demsey fue más al fondo: Taylor vivía en una cálida y seca casa con su esposa. Tenían un altillo, el cual casi no visitaban mucho, pero sí tenían un baño, que conectaba a su habitación, con un poco de moho sobre la ducha y la ventana.

Él no había viajado al extranjero. No tenía antecedentes de drogas. Trabajaba en una oficina que no tenía exposiciones evidentes. Y tocaba guitarra y saxofón en una banda local.

Finalmente, las preguntas de Dempsey tocaron suelo: la pareja había reemplazado recientemente el cubre lecho sintético de su cama por un edredón de plumas y almohadas de plumas. Taylor tenía una enfermedad en los pulmones por su edredón de plumas.

Enfermedad pulmonar por edredón de plumas

Las alergias a los pájaros no son poco extrañas. A menudo llamada asma de criadores de aves, sus síntomas pueden variar desde una tos jadeante, secreción nasal e irritación ocular, hasta asma y complicaciones más serias como las de Taylor.

Las personas con alergias corren mayor riesgo cuando limpian las jaulas de las aves, o los pajares, y durante le época del año en la que los pájaros cambian de plumas.

La enfermedad pulmonar causada por los edredones de plumas es un subconjunto del asma de criadores de aves, y es difícil de diagnosticar debido a su rareza y a su amplia variedad de tiempo y tipo de síntomas.

El comienzo de los síntomas después de la exposición a nuevos edredones o almohadas de plumas puede variar de tres semanas a cinco años.

La dificultad al respirar puede incrementar con el paso del tiempo, y el paciente puede tener episodios de sudoración en la noche, tos seca, pérdida de peso y fiebre. Esta condición a menudo es diagnosticada erróneamente si la persona dice no tener aves en su casa, y muchos doctores no piensan en preguntar por los cubrecamas.

El reconocimiento temprano de la exposición al antígeno aviar y la eliminación de las cobijas de la cama u otro irritante es fundamental para la recuperación de los pacientes, enfatizó Dempsey.