TIJUANA.- El director y subdirector de Bomberos Tijuana, José Luis Jiménez y Óscar Guillén Pacheco fueron destituidos de sus cargos tras ser acusados de hacer negocio con el agua y recursos de la dependencia.
También el jefe de Talleres, Francisco Javier Beltrán fue separado del cargo.
Las pruebas fueron entregadas al Alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz quien ordenó el cese fulminante ante las evidencias presentadas de presuntos malos manejos.
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En breve nombró a Néstor Nicolás Alarcón Morales como encargado de despacho quien tiene más de 20 años en la dependencia.
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Al momento se presentaron las pruebas ante la Sindicatura Procuradora para que inicie la carpeta de investigación y el lunes se presentará una denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
Al ahora exdirector y subdirector se les acusa de tener un taller mecánico propiedad de la hermana del segundo donde llevaban las unidades de Bomberos y en dos meses facturaron al Ayuntamiento más de 600 mil pesos.
Además, se usaba el agua y las pipas de las dependencias para un negocio particular.
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