TIJUANA.- Tras el reciente escándalo por el operativo en Saldos Koko, se informó que la intervención del SAT de Baja California (SAT BC) fue solicitado por autoridades federales de acuerdo con la gobernadora Marina del Pilar.

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De acuerdo con la mandataria se tenía conocimiento de que en dicho establecimiento había venta de vapeadores los cuales están prohibidos en México.

La situación provocó la reacción de la dueña mediante una transmisión en vivo que se viralizó y denunció que había sido víctima de extorsión para permitirle seguir operando.

La gobernadora del estado, Marina del Pilar Ávila Olmeda, declaró que se realizará una investigación exhaustiva sobre los eventos recientes, haciendo énfasis en la supuesta intervención irregular del personal del SAT BC y los agentes de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana (FESC) que acudieron en apoyo. Además, instruyó al secretario de gobierno del Estado, Alfredo Álvarez Cárdenas, para que se reuniera este lunes con la empresaria afectada.


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"Llamó mi atención la forma en que sucedieron estos hechos, inmediatamente pedí al secretario de gobierno que atendiera esta situación; llegó Luis Moreno por instrucciones mías, para apoyar a la afectada, a la empresaria", dijo la gobernadora sobre el operativo en la negociación, de donde finalmente se decomisó mercancía diversa como parte de las acciones.

La mandataria subrayó que solicitó información al SAT federal respecto a lo acontecido, aclarando que el SAT BC actuó en apoyo a una solicitud federal. Sin embargo, explicó que no se le notificó previamente sobre este tipo de operativos debido a que son "actividades cotidianas y comunes" de la dependencia, cuyo objetivo es verificar que los comerciantes cumplan con sus obligaciones fiscales, especialmente aquellos que manejan mercancía importada, como fue el caso.

Ávila Olmeda reiteró que la intervención estatal se justificó porque "se contaba con toda la información para hacer un acto de molestia" (sic), refiriéndose a estas inspecciones comerciales, y mencionó que los vapeadores, prohibidos en México, fueron una de las razones principales para llevar a cabo el operativo.