WASHINGTON.- El presidente Donald Trump anunció el sábado que postergó una operación nacional para deportar a inmigrantes que residen ilegalmente en Estados Unidos, diciendo que les dará tiempo a los legisladores para que hallen soluciones a los problemas en la frontera sur.
Tomó la medida después de que la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, le llamó el viernes para pedirle que suspendiera el operativo, según una persona al tanto de la situación que carece de permiso para declarar sobre ella y que por lo tanto pidió guardar el anonimato.
Por otro lado, funcionarios gubernamentales le dijeron a The Associated Press que al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas le preocupaba que los detalles filtrados a los medios de comunicación pudieran generar riesgos para sus agentes.
“A solicitud de los demócratas, he demorado el Proceso de Retiro de la Inmigración Ilegal (Deportación) por dos semanas para ver si los demócratas y los republicanos pueden ponerse de acuerdo y hallar una solución a los problemas de asilo y resquicios legales en la frontera sur”, escribió Trump en Twitter. “Si no, ¡las deportaciones empezarán!”
Los legisladores están sopesando si darán 4.600 millones de dólares en fondos de emergencia para ayudar a las agencias fronterizas que pasan apuros para manejar el creciente número de migrantes que cruzan la frontera. La medida fue aprobada en una comisión por 30 votos contra uno. Esa votación bipartidista probablemente derive en que el Senado encabece la redacción del proyecto, el cual aún requiere ser aprobado para convertirse en ley antes de que la Cámara de Representantes y la cámara alta se vayan de vacaciones la semana próxima.
Pelosi respondió al anuncio de Trump con su propio tuit, en el que afirmó: “Señor presidente, la postergación es bienvenida. Se requiere tiempo para una reforma migratoria amplia. Las familias deben mantenerse juntas”.
Tres funcionarios del gobierno dijeron a la AP que la operación había sido postergada debido a preocupaciones por la seguridad de los agentes después de que detalles de la redada se filtraron a los medios de comunicación. El comienzo del operativo, previsto para el domingo, buscaba a personas con orden definitiva de expulsión y familias cuyos casos habían sido resueltos sumariamente por los jueces.
A principios de la semana Trump tuiteó que la operación era inminente y que se deportaría a “millones” de personas.